Powered By Blogger

jueves, 18 de agosto de 2011

Capitulo 20: Relámpagos




 - Matt… ¿Es normal que en tu pueblo haya una nube gris en el cielo?-. Cruz se sobó los hombros tratando de acomodárselos mientras le daba las manos a Matt para que se levantara.

-No…no es normal, algo anda mal aquí-. Matt alzó la mirada y buscó el origen de las nubes grises. -¡Cuidado!- Un Gran relámpago golpeó el lugar donde nos encontrábamos parados.

-¡Matt ven acá!-. Corrí a cargar a Matt para sacarlo del área de riesgo y ponerlo en un lugar a salvo.- ¡Cruz, trae tus nalgas hasta aquí y trata de no morir!-.

-¡A la orden hermano!-.  Otro relámpago calló cerca de donde se encontraba Cruz derribándolo mientras corría hacia nosotros dejándolo en el suelo, indefenso y mal herido.

-Rayos…Matt quédate aquí y cúbrete mientras voy por Cruz-.

-¡Tened cuidado!-

Corrí lo más rápido que pude para alcanzar a Cruz y llevarlo a donde se encontraba Matt y dejarlo a salvo también.

-¡Cruz!, ¿estás bien viejo?-. Cruz se encontraba tirado boca abajo con su brazo derecho roto. -Tranquilo Cruz te voy a sacar de aquí-. Cruz solo gemía del dolor y asentía débilmente con su cabeza. -¡Imbécil te dije que tuvieras cuidado!-.

Senté a Cruz a un lado de Matt y trate de componer su brazo. - ¡Restit…!-. Otro Relámpago impactó en el centro dejando ver una silueta a lo lejos entre la neblina de tierra que había ocasionado este.

-Sven…mira, ¿quién es él?-. Matt apuntó con la mirada a un caballero que se desprendía de la neblina.

-A decir por la forma en la que está blandiendo su espada hacia nosotros yo creo que no es nuestro aliado, quédate aquí, yo iré a ver quién es y qué es lo que quiere-.

-De acuerdo, yo cuidaré a Cruz mientras tanto-.

Caminé al centro del pueblo donde estaba parado aquel oscuro caballero, su armadura era celtica, hecha de metal, al parecer forjada a mano, tenía grabados de oro en los guantes y en las calzas, la espada era de doble filo y su escudo tenía el mismo grabado que las creaturas que había mandado Lucifer para tratar de detenernos.

-¿Quién eres y porqué perturbas estas tierras?-.

-Mi nombre es Gordox, dios de los relámpagos y campeón de los cielos, he sido enviado para detener la herejía en contra del señor de los cielos, Dios me ha enviado a detenerlos y en caso de reusarse, matarlos-. Gordox alzó su espada tomando su postura de defensa en caso de que lo atacara.

-No me importa quién te haya enviado, nosotros hemos tomado una decisión y no pararemos hasta encontrar la forma de vencer a la muerte, tu amo sabe el porqué estamos haciendo esto y algún día nos perdonará, no obstante tengo que admitir que tu historia fue muy convincente, pero, el emblema que portas en tu escudo es signo de que sirves a otro amo y quien sirve a dos amo a uno defraudará, así que elije caballero, ¿De qué lado estás?-.

-eres más listo de lo que pensaba, no es fácil engañar a aquellos que han sobrevivido al ataque de un vallado de ángeles o a las más viles creaturas del infierno, sin embargo mi fuerza y poderes no se comparan a cualquier otra cosa que hayáis visto antes, prepárate a ser enjuiciado por el máximo rey de los cielos y amo de los relámpagos-.

Gordox comenzó a reír y se elevó en los cielos para lanzarme relámpagos y comenzar nuestra batalla.

-Déjamela a mí…- Cruz y Matt estaban a mis espaldas sin que yo me diera cuenta del acto.

-¡Cruz! ¿Estás loco?, tienes roto un brazo, ¿Qué te hace pensar que podrás ganar?-. La preocupación por mi compañero crecía por el temor a que me contestara una estupidez.

-¡Se que lo haré porque soy un Belmont y a esto me dedico!-. Una excelente respuesta empleada en un mal momento, Cruz se abalanzó disparando a una mano al caballero que yacía en el cielo.

-¡Pequeño humano!, ¿en verdad crees que el armamento humano me podrá hacer algo?-.

-¡Cruz! El tiene razón, no hay forma de que las balas humanas penetren las armaduras forjadas mágicamente, ¡Tienes que salir de ahí!-.

-¡Decisión equivocada humano estúpido!-. Gordox lanzó un par de relámpagos a los brazos de Cruz haciendo que estos estallaran dejando solo parte de los huesos.

-¡AHW!-. Cruz lanzó un grito de desesperación y dolor por la explosión.

-¡CRUZ!-. Matt exclamó al aire cuando este cayó al suelo.- ¡Es mi turno!-.

-Matt no lo hagas, hay que encontrar su punto débil y des…-.

-¡Calla!, Ustedes salvaron la vida de mi pueblo, cumpliste la última voluntad de mi padre, estoy en deuda de vida con vosotros, si he de morir será en batalla, será protegiendo a los guerreros que han dado su vida por proteger la mía, os agradezco su ayuda, pero ahora debe cuidar a Cruz, yo me encargaré de derrotarle-. Matt estaba cegado por la ira, podía sentir el poder que encerraba en su interior, era un poder colosal a punto de estallar.

-Matt… si esa es tu decisión tan mucho cuidado y no te dejes cegar por la ira.

-Humanos insensatos, ¿no os habéis dado cuenta a lo que se enfrentan?, no hay forma de que ganen-.

-Puede que seamos humanos, puede que seamos insensatos, pero tenemos algo que los demonios o los ángeles o incluso un dios no tiene, tenemos el poder de la magia-.

-Ammm…Matt eso sonó de película, solo trata de que no te mate por favor.

-Es hora de que conozcas al hechicero más grande que ha habitado estas tierras-

-Adelante, que comience la diversión, me encanta divertirme con mis adversarios, vamos ataca tu primero, te daré la oportunidad de que empieces antes de que termines como tu amigo-.

-Te arrepentirás de haber dicho eso-.

No confiaba del todo en Matt pero estaba seguro de que no moriría, ya que había algo en sus ojos que no había notado antes… tenia esperanza 

No hay comentarios:

Publicar un comentario